Indice de Expectativa Pymes (IEP) del IAE 65% cree que la situación empeora

 El 75% de las pymes tiene dificultades a la hora de cubrir puestos de trabajo y el 65% cree que la situación del país empeorará, afirma una encuesta del IAE Business School, realizada entre 470 empresarios.

 

De esta forma, el «Índice de Expectativa Pymes (IEP)» reflejó que los empresarios prevén un segundo semestre desfavorable para el país y que tienen trabas a la hora de conseguir personal.

Ante la pregunta sobre “¿cuál cree que será la situación del país de cara a los próximos seis meses?”, la proporción de “peor” ha crecido del 58% al 65% con una reducción de “mejor” del 14% al 5%.

 

En línea con este indicador, acerca de la pregunta sobre qué resultado espera para su empresa en los próximos seis meses, la respuesta “mejor” cayó del 49% al 41%, elevándose la respuesta “peor” del 8% al 13%, desde diciembre 2021 a junio 2022.

 

Además, varios encuestados afirman haber suspendido inversiones importantes, no por falta de recursos económicos sino por falta de talentos para operarlas.

 

“Evidentemente, el déficit educativo y el deterioro en la cultura del trabajo que se percibe a través de los años, dadas las crisis recurrentes donde el país ha caído, están siendo en la práctica, una amenaza a la reactivación necesaria para generar empleo que reduzca la pobreza estructural. La buena noticia es que el 76%, no tiene pensado reducir su plantilla”, reflexionó Guillermo M. Fraile, Profesor del IAE Business School, Universidad Austral.

 

El escenario se confirma mediante los siguientes indicadores:

 

–En diciembre de 2021, el 62% de los encuestados tenía en cartera un proyecto para implementar que consideraban importante para la empresa. En junio de 2022 ese porcentaje se redujo al 49%.

 

-Respecto de las inversiones para los próximos 12 meses, el 28% contestó que no las tienen previstas y el 23% contestó que lo consideran “difícil”.

 

-El 74% afirmó haber tenido dificultades en conseguir los talentos necesarios para cubrir los puestos, y el 62% indicó que aún así planean incorporar personal en el próximo semestre.

 

-Ante la pregunta, ¿cómo describiría que le está yendo a su empresa comparado con seis meses atrás? La respuesta de “mejor” se redujo del 76% en diciembre 2021 al 68% en junio 2022.

 

-Sobre las preocupaciones del sector, la principal de hace seis meses era “la inestabilidad de las reglas de juego” y era indicada por el 29% de los encuestados. En tanto que en los primeros meses de 2022, la mayor preocupación pasó a ser la “inflación”, con un aumento del 24% al 38% de resultados en el período.

 

“La sociedad en general sabe que el mundo Pyme es y será, en gran medida, el motor de desarrollo en la creación de empleo. La previsibilidad de las reglas de juego y las expectativas positivas del empresario Pyme serán los pilares claves para lograr un mejor estado de ánimo social y de inversiones que permita torcer la caída en la que está sumergida la sociedad por tantos años de desencuentro. Debemos llegar de manera inmediata al ámbito de los acuerdos dejando atrás años de divisiones que afectan directamente a los más necesitados”, concluye Fraile.-

 

Planificar en una Pyme en la Actualidad

 Planificar en una Pyme: hoy es imposible tan solo actúa como generador de estrés. Producir y vender sin precio de referencia en medio de una inflación creciente, es a lo que nos enfrentamos a diario quienes intentamos llevar adelante a una pequeña empresa, que diseña, fabrica y vende indumentaria, tanto como les ocurre a empresarios de otros rubros del entramado PyME. Resulta difícil encontrar en el escenario actual una brújula de la que aferrarnos para planificar y trazar la estrategia a seguir para la próxima temporada primavera 2022 y verano 2023, y ni pensar hacerlo para él próximo año. Hoy nos encontramos hoy trabajando económica y financieramente a ciegas. La crisis económica actual nos cambió el día a día: la planificación es hoy una utopía, como para muchas otras Pymes de la Argentina. Cómo calcular los costos si resulta muy difícil conseguir algunos insumos, nada tiene precio, ni fecha de entrega. Comprar insumos se volvió un trabajo complejo y hasta tóxico diría; que nos insume gran parte del tiempo. Esta falta de insumos tiene una lógica: los proveedores no pueden definir los precios y eso impacta en la cadena productiva. Pero este mismo problema se replica cuando a nosotros nos toca vender nuestros productos. ¿Y si no puedo volver a fabricarlo a los nuevos precios de insumos y aumentos en la mano de obra? ¿Cuánto debo subir su precio público por las dudas? ¿Y si no lo vendo? No sabés qué valor está bien o qué está mal, y tomar decisiones en este contexto, que las Pymes las tomamos todo el tiempo, hace que el estrés sea constante. Que tranquilo estaba asesorando empresas detrás de un escritorio. Está claro que las Pymes no tenemos el mismo respaldo que una gran empresa, y por ende trabajar al costo o a pérdidas no es un lujo que podemos darnos. A diario hay cambios para importar materia prima y eso nos afecta directamente, además de la suba de precios, las disparadas del dólar, la diversidad en los tipos de cambios, y las dificultades para conseguir personal calificado, los dueños de pequeñas empresas hacemos lo que podemos siendo estos los temas de conversación con nuestros colegas, y no otros como familia o deportes, temas de otros tiempos. Aquel segundo trimestre de 2020 nos encontró con el local cerrado, pero también sin poder producir, parecía que no existía futuro. Recién en la segunda parte del 2021 y en el primer trimestre del 2022 sentimos que comenzaba el fin de la incertidumbre, sin embrago desde allí todo se fue complicando. Pese a ellos seguimos apostando por el país y que está situación no pude durar para siempra, como también lo hacen la mayoría de las PyMEs. Hoy lo único en que las PyMEs podemos pensar, imposibilitados de planificar… es en cómo sobrevivir.

 Por Claudio Zambito Socio de la Tukana – Moda y Diseño. Socio Fundador del Instituto Argentino de la PyME Asoc. Civil