Las Pymes de las Economias Regionales

 Que los gobiernos provinciales son verdaderos feudos, no es novedad. Sin ideas para desarrollar la producción, hacer crecer la economía y el bienestar de sus habitantes. Tienen lacayos de su gobierno que mantienen pobres a los pobres pero también contentos y sobones, mansos. Estos sirvientes usan el dinero dado del estado sin control y con grandes partidas para hacer unas casas, hacen asados, obedecen, respetan, tienen miedo, en algunos casos, una admiración enfermiza, la adicción a la servidumbre. Son movimientos muy, muy “nacionales”, con mucho mando, crean estados dentro de los estados, siempre listos para levantar las lanzas del piquete cuando le convenga al poder monárquico de un persona o entidad que se aprovecha de los demás de manera despiadada, en definitiva. antropófagos de los pobres con que se alimentan, mientras tanto sus provincias compiten tristemente por ir a la cabeza de los índices de pobreza y miseria. Conviene entonces preguntarnos de dónde saca el dinero que reparte el estado provincial, del reboleo de los recursos impositivo que hace el gobierno nacional, por medio del anacrónico sistema de coparticipación federal, del convenio multilateral del impuesto a los ingresos brutos y a algunos impuestos y tasas provinciales. Hace rato que conocemos la podredumbre de esta situación y no hemos hecho nada. Resultamos fanáticos o indiferentes, el caminito de esta decadencia que recorre la economía, la sociedad rota y las mentes cada vez más próximas a nuestros abuelos, los primates superiores. ¿Y la economía regional? En realidad… No existe como tal.

Dr. Claudio Zambito

Empresario MicroPyme

Miembro Fundador del IAP